A pesar de que Guanajuato ya no es estado prioritario en analfabetismo, pues en los últimos años los indicadores han ido descendiendo, el objetivo para 2020 del Instituto de Alfabetización y Educación Básica para Adultos (INAEBA) es continuar ofreciendo a los guanajuatenses la oportunidad de aprender a leer, escribir o acreditar su educación básica.
José Rentería
Celaya, Gto; a 05 de febrero de 2020.- A pesar de que Guanajuato ya no es estado prioritario en analfabetismo, pues en los últimos años los indicadores han ido descendiendo, el objetivo para 2020 del Instituto de Alfabetización y Educación Básica para Adultos (INAEBA) es continuar ofreciendo a los guanajuatenses la oportunidad de aprender a leer, escribir o acreditar su educación básica.
La maestra Esther Angélica Medina Rivero, directora general de INAEBA presentó el plan de Proyectos para 2020, donde el objetivo continúa siendo llegar a aquellas personas que por cualquier motivo no tuvieron la oportunidad de tener una formación educativa o simplemente la abandonaron.
Señaló que Celaya, al igual que en León e Irapuato, son los que presentan un mayor número de beneficiados, atribuyéndolo a la participación ciudadana para acercar los servicios educativos a todo sector de la sociedad.
A nivel nacional se tiene registro de un 3.8% de analfabetismo y 3.0% de rezago educativo, en el Estado de Guanajuato 4.5% y 33.4%, respectivamente; en Celaya se registra .8% debajo de la media nacional en analfabetismo (3.0%) y 4.2 puntos porcentuales por debajo en el indicador de rezago educativo (26.4%). La meta para este año es ampliar el número de beneficiados, pues 97,664 celayenses se encuentran en rezago educativo, de los cuales 11,258 no saben leer y escribir, no tienen primaria 29,802 personas y sin secundaria 56,604.
La directora general de INAEBA destacó que durante el año 2019, Guanajuato ocupó el primer lugar a nivel nacional con el mayor número de acreditados, reconociendo los esfuerzos y compromiso del Gobierno del Estado con las y los guanajuatenses; gracias a ello casi 70 mil personas aprendieron a leer, escribir o acreditaron su primaria y secundaria.
Finalmente solicitó el apoyo de la sociedad para poder llegar aquellas personas que no ingresaron o abandonaron el sistema escolarizado y que sin importar la edad tienen como propósito continuar con su formación académica, que les haga mejorar su calidad de vida y las de sus familias.
