Luis Antonio Ladino, investigador del Centro de Ciencias de la Atmósfera de la UNAM, explicó que el polvo del Sahara, proveniente del occidente de África, contiene materiales biológicos y químicos que son potencialmente dañinos a la salud respiratoria.
Agencias
México; 25 de junio de 2020.- Especialistas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), alertaron que la nube de polvo proveniente del Sahara que llegó a la Península de Yucatán podría causar afectaciones de salud a las personas que ya padecen enfermedades respiratorias previas.
En conferencia de prensa virtual, el doctor Luis Antonio Ladino, investigador del Centro de Ciencias de la Atmósfera de la UNAM, señaló que esta “inusual” tormenta de polvo que ha llegado a México de forma paulatina puede generar una mala calidad de aire “que puede entrar al sistema respiratorio”.
Explicó que el polvo del Sahara, proveniente del occidente de África, contiene materiales biológicos y químicos que son potencialmente dañinos a la salud respiratoria.
En los últimos dos días, aseguró, en la ciudad de Mérida, Yucatán, se han detectado que estos materiales o partículas que se encuentran en el aire y pueden ser dañinos tuvieron un incremento de 800 por ciento respecto a los niveles normales de esta región.
Ladino señaló que este fenómeno es de recurrencia anual, y desde 2017 que se han hecho mediciones específicas en Mérida se ha detectado un incremento de partículas en el aire en un máximo de 300 por ciento, por lo que “hoy el incremento es atípico”, mencionó.
Alejandro Aguilar Sierra, investigador del Instituto de Geografía de la UNAM, señaló que ante esta situación lo más recomendable para las personas que se ven afectadas por este fenómeno natural es extremar precauciones.
“Son recomendaciones parecidas a las actuales por el coronavirus: permanecer en casa y protegerse con cubrebocas“, alertó.
“La recomendación es proteger vías respiratorias usando cubrebocas y evitando que las partículas las respiremos pues una vez que las respiremos quedarán en la tráquea, pero hay partículas pequeñas que podrían quedar en los pulmones, pasando a los alvéolos y eso sí afectaría a la salud”, apuntó.